Cuándo es necesario intervenir
La disfunción de este sistema implica una dificultad para procesar u organizar el flujo de información sensorial que nos proporciona nuestro cuerpo y el mundo que nos rodea.
Cuando la información sensorial llega de manera confusa, agobiante o distorsionada, existe una mayor predisposición a tener dificultad para prestar atención, aprender, planificar y hacer cosas de forma hábil.